¿Dónde ponemos el foco? La responsabilidad del Administrador

Recientemente ha salido a la prensa la lamentable noticia de un administrador de fincas que ha quebrado dejando 16 comunidades en riesgo por sus saldos. Inmediatamente, se genera una alarma popular que, por comprensible que sea, está llevando a situaciones que parecen ser el remedio al problema, cuando no lo son en absoluto.

Hablamos de las ventajas y desventajas de tener una cuenta propia para la administración de la comunidad.

¿Es esta la solución? De ninguna de las maneras

Para poder trabajar el día a día el administrador debe disponer de las claves de acceso a la cuenta de cada comunidad, por tanto, si quisiera en una noche podría traspasar todos los saldos a donde le conviniera. Así que no habríamos ganado nada.

Si en un momento determinado faltan fondos a una cuenta individual, sencillamente se procedería a la devolución de los pagos, en cambio, cuando una cuenta es del administrador y conjunto, se’ establece un sistema de compensaciones que acaba beneficiando a todas las comunidades, dado que nunca se podrá dar un caso de falta de pago por falta de fondos.

Tal y como nosotros entendemos la administración de comunidades, que significa transparencia total y contabilidad a tiempo real, pretender que sea posible trabajando una a una cada importación de datos de cada comunidad es sencillamente imposible.

La solución es muy diferente. El administrador, como profesional responsable, debe poder trabajar con las herramientas que considere adecuadas. En este caso, una cuenta única para todas las comunidades porque después sabe que internamente todo quedará igualmente colocado en cada diario de comunidades pero la agilidad y rapidez pasa a ser real y absoluta.

El foco debemos ponerlo al exigir al administrador su máxima profesionalidad y eso significa, sobre todo, dar las garantías necesarias sobre el dinero de sus clientes que tiene confiados.

AMAT tiene totalmente cubierto este tema, no sólo por la póliza colegial aproximadamente de unos 25.000€ que tiene, sino por otra hecha expresamente desde hace más de 20 años por un importe de 2.000.000€.

¿Es esta la verdadera solución?

Lamentablemente estamos acostumbrados a que para no abordar realmente un problema, se busquen falsas soluciones. Lo que no podemos es seguir criterios como los Hacienda que nos trata a todos como presuntos defraudadores para no poner el foco y toda la fuerza de la justicia en los defraudadores reales.

La mayoría de los administradores son excelentes profesionales, que hacen su trabajo con extrema responsabilidad , y lo único que se les debe pedir es que sean eficientes en la gestión , competentes jurídicamente, fiscalmente, laboralmente y, sobre todo, seguros con la responsabilidad y, naturalmente, dando un servicio del siglo XXI: todo online y todo a tiempo real.

Joana Amat

Dirección